Renunciar a una herencia parece una idea poco inteligente porque ¿quién no querría aumentar de esta forma su patrimonio? Pero consultando a los abogados herencias Burgos puede sorprenderse cuando esta sea la recomendación que reciba de dichos profesionales.
Por una razón, está establecida en la ley la libertad de aceptar o renunciar a la herencia y es que, más allá de respetar los deseos de los herederos, la legislación también crea como un escudo protector al establecer la posibilidad de repudiarla.
Recordemos que en esta vida no todos se dedican a acumular fortunas, para otros el panorama está más lleno de deudas y, en este sentido, aunque se trate de los hijos o el cónyuge del difunto, nadie puede ser forzado a contraer una obligación que no es suya, de ahí que el código civil garantice esta libertad.
Una forma de proteger a la familia
La ley no establece condiciones para la renuncia, es decir, los motivos para repudiar la herencia no están expresamente previstos, sino que forman parte de la libertad del heredero de decidir si la acepta o no.
En este sentido, además de los pasivos que haya acumulado el difunto, también puede recomendarse la renuncia a la herencia en otros escenarios. Uno de ellos es utilizarlo como estrategia de protección a un familiar.
Suele ocurrir que entre todos los llamados a heredar uno esté en una situación económica precaria y el resto pudiera decirse que no necesita la herencia. En este caso, cuando los demás herederos quieren ofrecer su ayuda al menos favorecido, la renuncia es una alternativa aconsejable. Esto es muy habitual entre hermanos o hijos que hacen esto por su padre o madre.
No obstante, es recomendable que la decisión de renunciar a la herencia sea consultada con un abogado, él sabrá indicarle si esto es lo más conveniente para usted y el resto de los herederos.
